Una vez corregidos los fallos efectuados en la anterior partida, iniciamos esta segunda, que ya no fué tan fácil, como la primera, y mucho más reñida, ya que teníamos bastante claro donde conseguir los puntos para ganar la partida. La conclusión, que saqué en claro fué, en este juego de mayorías, que hay que construir edificos que den oro cada turno, ya que si no, a la hora de pagar los impuestos, te ves negro para poder pagarlos, sacrificando otras acciones, como las de conseguir materiales y trabajadores, tan esenciales para un buen desarrollo del juego. También hay muchas dosis de puteo a la hora de la construcción de propiedades, murallas, gremios, etc..que son los que dan los puntos importantes, a la hora de puntuar, en las rondas 3, 5 y 7. Es un juego en el que no hay respiro, que pasan los turnos muy deprisa, a 3 jugadores aún más, y que cuando acabas, volverías a jugar otra partida..es muy rejugable. Después de 2 partidas, mi puntuación para este juego es de un 7.5!
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